Maratón Alpino Madrileño (Objetivo Cumplido)

Este fin de semana nos acercamos hasta Madrid para participar en el Maratón Alpino Madrileño.

Después de estar 2 semanas parado por culpa del esguince intercostal no las tenía todas conmigo para hacer la carrera y gracias a ello intenté salir desde un principio bastante conservador.

Eran las 8:04 de la mañana cuando se dio la salida. Teníamos casi 20º y el calor amenazaba con hacernos sufrir más tarde en la parte más alta.

Este año se cambiaron los dos primeros km de la carrera para no provocar un pequeño embudo. Con todo hubo un par de momentos que nos tuvimos que frenar.

Desde aquí hasta Navacerrada tuvimos una subida constante pero bastante llevadera. Desde allí afrontamos por primera vez la subida a la Bola del Mundo.

Subida a la Bola del Mundo desde Navacerrada

Desde aquí afrontamos unos cuantos km  donde se podía recuperar hasta llegar a Cotos. Aunque tenía fuerzas para ir más rápido decidí dosificar las fuerzas.

Ya en Cotos me estaba esperando Nati y me dió los primeros ánimos de la carrera. Desde aquí otra vez a subir para coronar Peñalara. La subida no es excesivamente dura pero si bastante constante. La parte final tiene bastante piedra.

Haciendo publicidad para nuestro amigo Pablo, jejej

Cuando me faltaban algo más de 500 m ya viene Quintas para abajo. Nos damos ánimos y sigo con mi ritmo. Una vez arriba toca bajar de nuevo hasta Cotos pero por otro lado de la montaña.

Aquí Nati me da un poco de magnesio y me lo tomo todo para prevenir los calambres.

Desde aquí me mentalizo para no gastar demasiado pues viene la parte más dura de la carrera. Tenemos un par de km entre árboles y con sombrita para llegar al comienzo de la subida a Cabeza de Hierro. Me la tomo con tranquilidad. Pongo un referente y tomo como objetivo llegar hasta allí en 20´.

Una vez conseguido este me fijo que aún no estamos en la mitad de la subida. No me ciego, descanso unos segundos y vuelta a empezar. El siguiente objetivo lo vuelvo a dejar en 20´. Esta vez me cuesta un poco más pero lo vuelvo hacer. Por primera vez desde que corro en montaña tengo la sensación de que no tengo un ápice de fuerza. Las piernas no quieren andar, pero cuando en la últimas ocasiones era la cabeza la que me hacía parar, esta vez me dice todo el rato que tengo que seguir.

Cada vez se hace más difícil la subida. Hay que ir de piedra en piedra y las fuerzas están justas. Me dán un par de mareos pero me agarro a donde puedo y continuo. Ya se escucha a la gente del control. Un último esfuerzo y consigo llegar. Me dicen si estoy bien y como puedo les hago un gesto de que si. Ahora se que viene un tramo de bajar que aunque sigue siendo bastante técnico al principio me permite ir recuperando.

Se que en montaña los tiempos son lo de menos pero la subidita me llevo 51´ (en total era 1´6 km)

Desde aquí sabía que si aguantaba la cuerda larga después sería más llevadero. Cuando estaba subiendo el primer punto apareció el helicóptero para recoger a la chica que iba de primera pues se había caído y roto la mandíbula.

Sigo con mi ritmo y cuando estoy llegando a la Bola del Mundo me encuentro con Quintas que va mal del estómago. Me dice que siga que parará en el siguiente control para que lo bajen.

Empiezo la bajada de la Bola. Se me hace larga porque las fuerzas van justas y tiene mucha pendiente. Llego a Navacerrada, como bien en el avituallamiento y desde ahí a correr todo lo que se pueda. Los últimos 7 km son prácticamente en bajada.

Ya se va escuchando el ruido de la meta. Un último esfuerzo y objetivo conseguido. Me conformaba con hacer 6h30´ y al final hice 6h13´. Lo mejor de todo es que no terminé fastidiado como en otras ocasiones y las piernas quedaron bastante bien para el tute que les metí.